Mientras me queden fuerzas
Mientras me queden fuerzas
empuñaré la pluma,
descargaré en la tinta
inquietudes, penas, dudas.
Sellarán mis labios
las dolencias que me abruman,
pero hablarán mis manos
alejando así las brumas.
Mientras me queden fuerzas,
empuñaré la pluma,
daré voz a los que sufren
y a los que ya nadie escucha.
Reflejaré en poemas
o en relatos la cordura,
las quimeras, sobresaltos,
los sueños y la locura.
Mientras me queden fuerzas…
y posea alma mi pluma.