Poemas al viento
Pueden intentar callarnos
amordazar nuestros labios
enjaularnos por un tiempo
malear nuestras palabras
alterar los pensamientos
silenciar las almas rotas
o acallar pueblos que lloran.
Lo que nunca lograrán,
por más empeño que pongan,
es poner puertas al viento,
las murallas a la mar
o que vuelen las gaviotas.
Ni que se calle el poeta,
instando al mundo a pensar,
el poeta no se rinde,
no doblega su sentir,
tendrá siempre que gritar
por el hombre y su vivir,
y el mundo sigue girando
haciendo su voz oír.